"Padres y Educadores": La calidad de vida

"Padres y Educadores": La calidad de vida

Ma. José González-Blanch Hoy, como ayer, todos aspiramos a vivir bien. De eso no cabe duda. Probablemente, pocas expresiones se hayan popularizado más a lo largo del siglo XX que esta de la "calidad de vida", hasta el punto que ha llegado a ser un tema clave, incluso un tópico apremiante, un símbolo que agrupa todo aquello que más o menos vagamente se valora y se quiere, sobre todo a la hora de debatir sobre la planificación y evaluación de los servicios asistenciales. Sin duda estamos ante una expresión talismán, un slogan, una muletita que gustan usar abundantemente, en particular, nuestros políticos. Y sin embargo, el término "calidad de vida" tiene una historia relativamente breve, como nos señala el profesor Diego García. En los años 30, fueron manufacturados, sobre todo en Estados Unidos, muy preocupados por medirlo todo, pues ya no se trataba sólo de producir mucho, sino de hacerlo también con calidad y utilizar este criterio como arma publicitaria para captar nuevos clientes. El control de calidad pasó a ser así un elemento básico de la política de las empresas que poco a poco, fue extendiéndose por Occidente. De ahí pasó a las Ciencias índices armonizados que permitieran evaluar la calidad de vida de los individuos y de las sociedades, así como establecer comparaciones entre unos y otros niveles y poder fijar políticas de intervención. Es importante, pues no perder de vista que este término procede de la teoría empresarial, primero y de la sociología después. De aquí, podemos darnos cuenta que el concepto de validad de vida no es un concepto descriptivo, sino valorativo. Esto significa que no es un hecho, sino un valor, y en tanto que tal es el resultado de un proceso de valoración, estimación o preferencia. Dado que la calidad de vida es un valor, existen tantas teorías distintas de la calidad cuantas son las concepciones de valor: hay teorías naturalistas, otras emotivistas, otras utilitaristas y otras propiamente axiológicas. ¿Qué es y en qué consiste la calidad de una vida humana? ¿Cómo puede evaluarse? ¿Quién la evalúa? ¿Qué peso debe tener en la toma de decisiones vitales? Los juicios de la calidad de vida son siempre relativos a un marco de referencia, por eso, diferentes actitudes ante la vida suministran criterios diferentes para evaluar la calidad de vida. Este debate está en los orígenes mismos de la Bioética.

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Saludos
Rodrigo González Fernández
Diplomado en RSE de la ONU
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